Engaño Aceptado

Camino en un mundo imaginario que solo veo yo, donde para mi soy alguien importante y para la mayoría solo soy uno mas en este panal de abejas colmado de miel o hiel. Quizá la suspicacia del mundo hace que aun siendo yo un individuo tangible, nadie se acerque a abrazarme cuando grito de modo incesante que lo hagan o puede tan solo que sea invisible a ojos de las personas, ya que dada mi inexperiencia en este deleznable planeta diría que no todos los “homo sapiens” tienen el privilegio de llegar al cenit, es decir ser personas. Esto me lleva a un descontrol emocional que me debilita de modo interno sin que pueda parar la avalancha de extraños sentimientos y preguntas que pasean sin permiso por mi masa de materia gris. Y si esto tan terrible es el mundo… déjenme vivir eternamente. Por que aunque heteróclito e inaudito, también es grato y entretenido. Por eso yo, una homo sapiens luchado por llegar al cenit, paro un momento y detengo mi viaje y tras la introspección concluyo, es cierto, me faltó valor, otórguenme el adjetivo de pusilánime por que no fui capaz de alcanzar el cénit todavía, pero e de decir que no resulta fácil ser persona, es mas complicado que ser individuo, es mas retorcido ser culto, conocer cuantas injusticias son cometidas cada segundo en el total de nuestro planeta tierra… y no más fácil asumir que todo ello es ineluctable. Quizá, me siento tan sola a veces, por que soy incapaz de asumir la realidad irrefutable, o quizá por que padezco solipsismo y eso me impide ver más allá. En cualquier caso, espero que la azagaya de la ilusión se clave de nuevo en alguna de mis neuronas y me haga presa de su tela de araña venenosa, pese al peyorativo que le concedo de falaz, prefiero la mentira que morir de muerte súbita y lenta al encender la televisión y escuchar las noticias.